¿Podemos llevar avisadores de radares en el coche?

¿Podemos llevar avisadores de radares en el coche?
30 de junio de 2021
Publicado por: Talleres Camino

En el mercado existen avisadores de radares y a veces nos puede surgir la duda de si estos dispositivos son legales, comparándolos con otros mecanismos como los inhibidores o detectores, que sí son ilegales.

Los avisadores de radares son unos dispositivos que nos informan de dónde se encuentra el radar, a través de la base de datos publicada por la DGT y que no interactúa con el sistema de control de velocidad.

Por ello, quédate tranquilo, este sistema es totalmente legal y su adquisición no conlleva sanción. Se trata de una fórmula que no avisa de los radares móviles, que no interfiere en el sistema de control de velocidad y que se encuentra disponible en la mayoría de navegadores o aplicaciones móviles.

Además, la Dirección General de Seguridad tiene en su página web un apartado en el que informa sobre los tramos y puntos de intensificación de vigilancia de la velocidad.

¿Cuáles son los dispositivos ilegales?

Te puede salir muy caro si intentas evitar una multa por exceder el límite de velocidad con un inhibidor o un detector de radar. Y es que, la utilización de este tipo de sistemas puede suponer una sanción superior a la del exceso de velocidad. Por ello, queremos diferenciar qué es un avisador y otro tipo de dispositivos que están prohibidos.

En el caso del detector, la principal diferencia es que es capaz de detectar las ondas de los radares, lo que supone que también avisa al conductor de los radares móviles, quedando prohibidos con una multa de 200€ y la pérdida de 3 puntos del carné.

Con respecto a los inhibidores capaces de deshabilitar el radar, el conductor puede circular a la velocidad que desee sin ser captado por los sistemas de control de velocidad. Este tipo de dispositivos son ilegales y conlleva una multa de 6.000€ y la pérdida de 6 puntos del carnet de conducir.

Ten en cuenta que la velocidad influye directamente en la distancia de frenada y en la gravedad de las lesiones, por lo que hay que circular siempre a una velocidad segura, teniendo en cuenta factores como las condiciones meteorológicas y el estado de las carreteras.