Problemas por el mal estado de los neumáticos

neumaticos
30 de septiembre de 2020
Publicado por: Talleres Camino

Uno de los aspectos claves en la conducción y en la seguridad de un vehículo son los neumáticos, ya que son el único elemento de contacto entre la carretera y la carrocería, además de ser los responsables de asegurar la estabilidad en la conducción. Así que, como puedes imaginar, es fundamental que circules con las cubiertas en buen estado para evitar algún susto o accidente.

Desde Talleres Camino te recomendamos que compruebes periódicamente su estado y presión para asegurarte una mayor seguridad cuando te pongas en carretera. De este modo, si al analizar los neumáticos detectas un desgaste irregular, tendrás que acudir a tu taller de confianza, ya que es síntoma de que algo no está bien, ya sea los neumáticos o algunos de los elementos que influyen en su desempeño.

Cuando circulamos con unos neumáticos desgastados o en mal estado, estamos poniendo en riesgo nuestra seguridad al volante, además de aumentar el consumo de combustible e incluso provocar problemas mecánicos en el vehículo.

En este sentido, lo más normal es que un desgaste irregular de los neumáticos puede deberse a que su presión no sea la recomendada por el fabricante, o bien a un defecto de montaje, lo que conlleva una serie de problemas en la conducción.

Para darte cuenta de ello, bastará con una simple inspección visual de las cubiertas girando las ruedas delanteras, dejando la banda de rodadura visible y comprobando si la profundidad es igual entre los extremos y la zona central.

Tipos de desgastes

Los desgastes irregulares más frecuentes son los siguientes:

  • Desgaste en los bordes exteriores: por regla general, suele estar provocado por una presión inferior a la recomendada o bien con sobrecarga, por lo que el neumático se aplasta contra el pavimento, rozando más los laterales, y por eso se desgastan. La solución es inflar los neumáticos y revisar la presión con más frecuencia.
  • Desgaste en la parte central del neumático: si esto sucede, es síntoma de que la presión es superior a la recomendada, por lo que la superficie de contacto del neumático con el asfalto es más pronunciada en la zona central de la banda de rodadura, lo que provoca un aumento de la distancia de frenado en mojado, una reducción por desgaste anormal, además de poder provocar aquaplaning. Para evitarlo, ajustar la presión de los neumáticos a la aconsejada.
  • Desgaste en uno de los bordes: cuando aparece este un desgaste en la parte interna o externa de la banda de rodadura, suele estar motivado por un mal alineado. Para solucionarlo, lo mejor es acudir a tu taller de confianza para que nos realicen un alineado de la dirección.
  • Desgaste no uniforme: suele aparecer cuando los neumáticos están mal equilibrados o los amortiguadores están en mal estado, haciendo que el vehículo vibre al superar ciertas velocidades. La solución pasa por equilibrar el neumático, acudiendo a un taller de confianza.

Recuerda que la presión de los neumáticos debe medirse en frío y sustituye las cubiertas antes de que lleguen a los 1,6 mm de profundidad del dibujo.